Cuando no eres lo que esperan se buscarán maneras de deslegitimarte.
Por: Juliana Olaya Gnecco
He pensado varias veces como iniciar este texto y creo que lo primero a tomar en cuenta es entender mi contexto y el porqué de las infinitas críticas que he recibido en esta carrera, no sin dejar de mencionar que todas y cada una de ellas no van al caso y me parecen, por no decir más, ridículas. ¿Qué tiene que ver que me guste la rumba, o que disfrute del tomar e incluso que sea abierta con todo lo que tiene que ver con mis relaciones intimas y hasta con mi imagen corporal con mi desempaño intelectual o capacidades para comprender, analizar y ser crítica. Puede que tanto para ustedes como para mi no tenga nada que ver una cosa con la otra, en eso estaríamos de acuerdo. Sin embargo, hay quienes priorizan mis conductas o mi personalidad en general para determinar bajo sus propios estándares que no soy buena o siquiera apta para desarrollar la carrera que he escogido.
Pues bueno, estas supuestas “razones” han sido aparentemente suficientes para subestimarme con mi quehacer filosófico, ya que lastimosamente lo que vengo a contarles aquí son varias vivencias que no me enorgullecen, pero ciertamente me han hecho más fuerte. Varias de estas se han dado bajo la frase “crea fama y acuéstate a dormir” esa frase que me ha perseguido varios años y de la que ya estoy bastante harta.
Varias de las críticas que he recibido han sido en escenarios informales, más específicamente la pola o sus derivados donde la charla entre compañeros no tiene las restricciones de un aula de clase. Es en este contexto donde recibí uno de los comentarios más ofensivos y menos pedidos de todos, la situación en general fue absurda ya que yo estaba hablando con mis amigos y alguien que no hace parte de mi circulo escucha mi conversación y de manera intrusiva se aproxima a mi a criticar mi cuerpo desvalorizando quien soy yo a raíz de mi apariencia. Fue una situación que me afecto mucho y más aún porque no fui capaz de decir nada al ver a mis disque “amigos” decirme que porque iba a armar problema.
En esta carrera me han subestimado por como llevo mi vida, como si fuera directamente proporcional que me guste parchar o la fiesta con que sea incapaz de cumplir con mis deberes académicos, ya varias veces he recibido criticas sobre como no se harían conmigo en un grupo o incluso ya estando en grupos con personas de la carrera no se han dirigido a mi para realizar los trabajos porque me subestiman cuando ni se han dado la oportunidad para saber como trabajo y asumen que no me responsabilizo. Incluso me han juzgado sobre mis decisiones en mi vida intima con el termino despectivo de ser una “perra”, como si mi vida personal influyera también en como soy como estudiante y aún peor como si eso fuera tema de conversación o asunto de alguien más. En fin esto es un método de desahogo si no es que un grito de frustración porque he callado muchas veces, porque me he comido cada una de las criticas y las palabras llenas de rabia, porque soy todo lo que para ellos se supone no debe ser una mujer, porque aparentemente me quita intelectualidad, porque aunque ellos mismos van a las farras conmigo, aunque se emborrachen como yo o parchen en la misma medida en la que yo lo hago se ve mal porque una vieja no debería estar haciéndolo. Ni mi cuerpo, ni mis decisiones en ninguna medida implican mis capacidades ni mucho menos cuando son temas tan personales y tampoco cuando algunos han sido rumores sin fundamento que me doy a la tarea de desmentir. Yo podré no ser el prototipo de académica que se busca y creo que por eso el afán de desprestigiarme, mi forma de vivir puede calificarse incluso como disruptiva en el ambiente del que hacemos parte y sinceramente yo nunca he querido serlo, pero quiéralo o no, no tendría porque ser asunto de nadie más que mío.
Porque recordemos que el modelo del filósofo esta ya muy trillado así como el supuesto modo homogéneo de desenvolverse en esta carrera, no hay una sola visión de las cosas, ni un solo tipo de persona que pueda dedicarse a ellas, ni una única manera de ver el mundo y plasmarlo en una idea. Por eso hoy cuestiono e incito a romper un esquema preestablecido en el que muchxs nos quedamos por fuera y animo a todo el que este leyendo esto a no tener miedo de equivocarse en el caminos que haya escogido por sus propias razones, pero sobre todo reprocho mucho que haya otrxs que se crean con el derecho de juzgar lo que podemos hacer o lo que no basándose en lo que no les concierne, al contrario creo que en vez de cuestionar mi estilo de vida, mi ropa y mis gustos o preferencias sería más coherente utilizar ese tiempo en cuestionarse verdaderas problemáticas como las que continúan permitiendo e incluso perpetuando.
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